Ofrendas para una entrada: la Puerta Oeste de la Bastida de les Alcusses

Vitrina 78
La entrada principal del poblado de la Bastida de les Alcusses fue reconstruida hacia mediados del siglo IV a.C. Debió ser un momento muy importante para la comunidad que habitó el lugar pues se llevó a cabo un ritual y se depositaron ofrendas para celebrar y recordar el momento: hay fragmentos quemados de la puerta anterior, vasos de cerámica, semillas y frutos, restos de animales así como cinco conjuntos de armas formados, cada uno, por espada, conocida como falcata, escudo y lanza pesada y ligera. Casi todos los restos están quemados y las armas inutilizadas, rotas o dobladas, siguiendo pautas conocidas en los rituales funerarios, aunque aquí no se han hallado restos humanos. El hallazgo es, hasta la fecha, único en el ámbito del Mediterráneo occidental.
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